El futuro de la industria textil en un mundo más cálido: cómo influye el calentamiento global en la demanda textil

Nov 28, 2024 Visto 703

Con el aumento de las temperaturas, las industrias de todo el mundo tendrán que adaptarse a nuevas realidades. Uno de los cambios menos comentados, pero más significativos, es la evolución de la demanda de productos textiles como consecuencia del cambio climático. La industria textil, tradicionalmente sensible a las necesidades estacionales, está viendo los primeros signos de transformación a medida que el calentamiento global altera la necesidad de ciertos tipos de tejidos.

1. El impacto del calentamiento global en los tejidos de temporada

La industria textil, especialmente los fabricantes de tejidos de invierno y de alta resistencia, ha prosperado históricamente gracias a las demandas estacionales de los consumidores de climas más fríos. Sin embargo, a medida que aumenta la temperatura global, es probable que disminuya la demanda de tejidos pesados de invierno. Un estudio de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) señala que, desde 1880, la temperatura mundial ha ido aumentando de forma constante a razón de 0,14 °C por década, aproximadamente, y las previsiones indican que esta tendencia se mantendrá.

  • Menos inviernos fríos, menos demanda de tejidos de invierno: A medida que el calentamiento global haga que más regiones experimenten inviernos más cálidos, se prevé que disminuya la necesidad de tejidos gruesos de invierno (lana, forro polar, materiales sintéticos pesados). Un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) predice que, por término medio, las temperaturas invernales aumentarán entre uno y dos grados centígrados en los próximos 50 años. Este cambio de temperatura influirá en los hábitos de compra, empujando a consumidores y minoristas a demandar tejidos más ligeros y transpirables.
  • Aumento de la demanda de tejidos de verano y de transición: Por otro lado, a medida que el calentamiento global provoque olas de calor más frecuentes y periodos estivales más prolongados, aumentará la demanda de tejidos ligeros, que absorban la humedad, protejan de los rayos UV y refresquen. Los estudios de McKinsey & Company sugieren que el mercado mundial de textiles funcionales -especialmente para prendas de exterior y activas- crecerá un 5% anual hasta 2030.

2. Modelos matemáticos para predecir el cambio

El desplazamiento de la demanda textil en relación con los cambios de temperatura puede modelizarse utilizando proyecciones básicas de temperatura y elasticidades en la producción textil.

A medida que aumenta la temperatura global, la demanda de distintos tipos de tejidos puede variar. Esto puede modelizarse mediante dos ecuaciones: una para los tejidos de invierno y otra para los de verano.

2.1. Demanda de tejidos de invierno

La demanda de tejidos de invierno disminuye a medida que suben las temperaturas. Esta relación puede modelizarse con la ecuación:

D(invierno) = D(invierno,0) - β × T

Dónde:

  • D(invierno)es la demanda de tejidos de invierno.
  • D(invierno,0)es la demanda inicial de tejidos de invierno antes de cualquier cambio de temperatura.
  • βes un coeficiente que representa la sensibilidad de la demanda de tejidos de invierno a los cambios de temperatura.
  • Tes el aumento de la temperatura.

Por ejemplo, si la demanda de tejidos de invierno disminuye un 5% por cada 1 °C de aumento de la temperatura, la ecuación muestra cómo disminuiría la demanda a medida que aumentaran las temperaturas. Según las tendencias climáticas actuales, en 2050 la demanda de tejidos de invierno en las regiones templadas podría disminuir entre un 10 y un 15%.

2.2. Demanda de tejidos de verano

Por otra parte, se espera que la demanda de tejidos más ligeros y transpirables, como los utilizados para la ropa de verano, aumente a medida que suban las temperaturas. Esto puede modelizarse con la ecuación:

D(verano) = D(verano,0) + γ × T

Dónde:

  • D(verano)es la demanda de tejidos de verano.
  • D(verano,0)es la demanda inicial de tejidos de verano.
  • γrepresenta la sensibilidad de la demanda de tejidos en verano al aumento de la temperatura.
  • Tes el aumento de temperatura.

Un aumento previsto de la temperatura mundial de entre 1 y 2ºC podría provocar un notable incremento de la demanda de tejidos como las mezclas de poliéster y elastano, ideales para la ropa de deporte y el uso al aire libre.

3. Lo que nos dicen los datos

Si observamos los datos históricos, vemos que ya están surgiendo algunas tendencias que apuntan a este cambio. Por ejemplo:

  • Venta de chaquetas de inviernohan disminuido en regiones como Europa y Norteamérica a medida que se generalizan los inviernos más suaves. Según un informe de Statista, las ventas de chaquetas de invierno cayeron aproximadamente un 5% anual en Europa en los últimos cinco años.
  • Ropa deportivaPor otra parte, los mercados de ropa deportiva están en auge. Se prevé que el mercado mundial de ropa deportiva crezca de 353.200 millones de dólares en 2020 a 439.800 millones en 2026, a medida que los consumidores opten por tejidos ligeros y funcionales que permitan realizar actividades al aire libre durante todo el año.

4. Adaptarse al cambio: El papel de la industria textil

Para los fabricantes textiles, la clave para prosperar en un mundo más cálido es la diversificación. De cara al futuro, los agentes del sector deben:

  • Innovar en tejidos funcionalesque responden a la creciente demanda de materiales que refresquen y absorban la humedad.
  • Invertir en materiales sostenibles y adaptablesque pueden rendir bien en distintos climas, desde fibras ligeras hasta tejidos resistentes al calor diseñados para condiciones más calurosas.
  • Controlar la evolución de la temperaturautilizando estrechamente el análisis predictivo y los modelos climáticos para anticipar mejor la demanda de tejidos.

5. Conclusión: Una industria en transformación

A medida que las temperaturas mundiales siguen subiendo, la industria textil debe evolucionar. Aunque la menor demanda de tejidos de invierno puede suponer un reto para algunos fabricantes, abre nuevas e interesantes oportunidades para quienes estén dispuestos a innovar y satisfacer la creciente demanda de tejidos funcionales y ligeros. Utilizando modelos predictivos y adelantándose a las tendencias climáticas, las empresas textiles pueden posicionarse para el éxito a largo plazo en un mundo más cálido.